Desde Cáritas Regional de Castilla- La Mancha hacemos nuestras las palabras de Rafael del Río Sendino, anterior presidente de Cáritas Española, en las que decía: “Nuestras cifras más valiosas son las personas que nos han confiado su vida, con las que juntos hemos creado nuevas oportunidades y esperanza”.
La Memoria 2016 de Cáritas Regional de Castilla-La Mancha refleja el compromiso de lucha contra la pobreza y la desigualdad que se desarrolla a través de las cinco Cáritas Diocesanas de nuestra Región (C.D. de Albacete, C.D. de Ciudad Real, C.D. de Cuenca, C.D. de Sigüenza-Guadalajara y C.D. de Toledo) y con el apoyo de una gran base social: voluntarios, colaboradores, benefactores, contratados, etc.
En la presentación de la Memoria de Cáritas Regional Castilla-La Mancha han intervenido Don Braulio Rodríguez, arzobispo de Toledo, Fernando Muñoz, presidente de Cáritas Regional, y Amador Casquero, coordinador regional.
Braulio ha hecho el llamamiento para ser comunidad, mensaje central de la campaña institucional de Cáritas “llamados a ser comunidad”. Aprender a vivir en común en la misma casa, en la Tierra común que nos acoge a todos. Todas las personas de un lugar u otro, tenemos los mismos derechos. Tenemos que ser capaces de reconocer la riqueza que cada persona aporta en la construcción de la sociedad. Se trata de vivir la cultura del encuentro como dice el Papa Francisco.
Fernando Muñoz, presidente de Cáritas Regional, confirma como el número de 6.076 voluntarios han sostenido la acción de Cáritas en 2016 en cada uno de sus programas, en los que se ha atendido a 46.219 personas con 17.345.976,59 € de recursos económicos invertidos.
Ha señalado como el tanto por ciento de recursos propios y privados (63,4%) ha aumentado en relación a los recursos públicos (36,6%) y en comparación al año 2015, donde los recursos propios y privados eran de un 56% y los recursos públicos de un 44%.
Ha explicado como el número de personas atendidas es muy similar al de 2015, pero sin embargo los recursos económicos invertidos han sido superiores en 2016 (en torno a 700.000 € más) siendo el motivo que aunque el número de personas atendidas se ha estabilizado en los últimos 4 años, la intensidad de la pobreza y sus efectos, así como el tiempo que lleva incidiendo en estas personas ha aumentado. Las personas que no han logrado coger “el tren de la recuperación económica” se han quedado anclados en la pobreza. Dicho de otra manera, la recuperación económica no ha llegado a los más pobres aún.
En cuanto a las necesidades que demandan: ayudas económicas, ayudas en especie (alimentos, ropa, calzado, enseres del hogar), farmacia y temas de salud, alquiler, transporte, libros y material escolar, aseo e higiene, alojamiento.
Refiriéndose al perfil de las personas que se han acercado a Cáritas, Fernando Muñoz, ha destacado que si durante la crisis hubo un cambio de perfil de las personas que se acercaban hasta nosotros porque eran personas que nunca lo habían hecho, ahora algunas de ellas han salido, pero otras continúan demandando los servicios de Cáritas.
No obstante, ha incidido en que el perfil principal de personas con las que se ha trabajado desde Cáritas, han sido personas muy olvidadas y empobrecidas, familias con pocos o ningún recurso, personas que viven en hogares donde no entra ningún salario por empleo en alguno de sus miembros, jóvenes y menores de familias empobrecidas y excluidas, personas drogodependientes, enfermos crónicos, personas sin hogar, temporeros, inmigrantes, personas mayores, mujeres, etc. En definitiva, personas muy empobrecidas, con historias de vida muy rotas, con las que nos encontramos y caminamos juntos.
El presidente de Cáritas Regional ha dado las gracias a todas las personas que hacen posible que los más empobrecidos puedan tener una mejor calidad de vida, luchan porque los derechos de los mismos sean reconocidos. Reitera el agradecimiento por tanto a voluntarios, socios, donantes, empresas, instituciones, administraciones, que hacen posible que desde Cáritas podamos seguir ayudando a tantas personas, poder hacer juntos Comunidad.