Gracias a la colaboración de empresas, instituciones y particulares ha sido posible mandar esta semana a Siria 11.000 kilos de ayuda humanitaria.
Desde el mes de octubre Cáritas Diocesana de Toledo está trabajando en la Campaña “Son mis hermanos” de Ayuda a Cristianos Perseguidos en Siria, respondiendo a la llamada de la Madre Agnès de la Croix, que en junio de 2016 estuvo en Toledo, y pidió a Cáritas ayuda para miles de personas.
Un equipo de voluntarios, coordinados por el delegado episcopal de Cáritas Diocesana de Toledo, don José María Cabrero, y el secretario general de Cáritas, Javier García-Cabañas, se han movilizado para que en tres meses se puedan enviar 11.000 kilos de ayuda humanitaria a Siria.
Esta semana se han enviado para todos los hermanos de Siria pañales, leche en polvo, juguetes, algodón, artículos de primeros auxilios, material escolar, ropa de abrigo, zapatos, termos para bebés, resina para prótesis, sacos de dormir, entre otros artículos, que han sido donados por empresas, instituciones y particulares.
El secretario general de Cáritas Diocesana de Toledo, Javier García-Cabañas, ha dado las gracias a todas los voluntarios que han hecho posible que “podamos enviar esta ayuda humanitaria, gracias a su entrega, a su tiempo y a su dedicación”, así como a todos los donantes que han atendido la demanda “que les hemos hecho”. Los 11.000 kilos de ayuda humanitaria serán recibidos por Madre Agnès de la Croix en Siria, con la que se está en permanente contacto “para garantizar que el envío llega a todas las personas que lo necesitan”.
Una parte de los artículos que se han enviado se han comprado con la recaudación del concierto celebrado en noviembre en el Salón de Actos del Colegio Nuestra Señora de los Infantes de Toledo, gracias a la Banda Sinfónica “Ciudad de Toledo”. Asimismo se ha financiado con el Concierto-Recital «Santa Teresa y la Virgen María», organizado por la Esclavitud de la Virgen del Sagrario, el pasado 28 de octubre en la Catedral Primada.
Hay que recordar que Cáritas Diocesana de Toledo trabaja desde hace unos años en el Programa de “Ayuda a Cristianos Perseguidos”, habiendo ayudado y acompañado hasta el momento a 20 personas de Irak y Siria que han llegado hasta Toledo; asimismo ha contribuido, gracias a los donativos de los toledanos, a la construcción de una clínica en Alqosh (Irak), un proyecto en el que se han invertido más 50.000 euros. Se trata de una clínica de medicina general que atiende a más de 2.000 familias de la zona, y donde trabajan un médico y una enfermera de aquel país.