El responsable de las Escuelas de la Paz de la Comunidad, Carlos Busto, manifestó que “los pobres son parte de la Iglesia” y “no son un adorno, sino que tienen que estar en el centro de la vida de nuestras comunidades, como miembros de pleno de derecho”.
Del 8 al 10 de enero se celebraron por medios telemáticos las IX Jornadas de Pastoral, organizadas por la Archidiócesis de Toledo, con el tema el “La comunicación y el diálogo con Dios y con el mundo” y teniendo como ponente a Juan Manuel Cotelo, periodista, director de cine y productor, que a lo largo de dos ponencias reflexionó sobre cómo podemos hacernos presentes, como creyentes, en el ámbito de la cultura y compartiendo su propia experiencia.
Entre las cuatro experiencias extradiocesanas que se dieron a conocer en estas Jornadas, Cáritas Diocesana de Toledo presentó a la Comunidad de Sant’ Egidio de Madrid, con Carlos Busto Cuervas-Mons, padre de familia, diácono permanente y responsable de las Escuelas de la Paz de la Comunidad en Madrid. En su intervención Carlos Busto explicó cómo es el acompañamiento y la relación que tienen con los pobres, en todas sus pobrezas y realidades, haciéndolo a la luz de la Encíclica Fratelli Tutti, y destacando en toda su exposición: oración y amistad.
El arzobispo de Toledo, don Francisco Cerro Chaves, en el cierre de esta experiencia, manifestó que “estamos llamados a la conversión de la caridad, porque la caridad es más que una ayuda puntual; es el deseo de vivir con el corazón de Cristo que te lleva a la caridad”, siguiendo los dos pilares en los que se basa la acción de la Comunidad de Sant’ Egidio: la oración comunitaria y la amistad con los pobres.
“Los pobres, según don Francisco, son un signo de credibilidad de la acción de la Iglesia porque la Iglesia nace para ser buena noticia para los pobres”.
Carlos Busto explicó cuáles fueron los orígenes de la Comunidad que nació en Roma en 1968 pero ya está presente en más de 70 países de Europa, África, Asia y América, con una fraternidad de fraternidades, “y que vive un compromiso local en la ciudad donde estamos presentes pero también con una visión internacional, trabajando por la paz y el diálogo interreligioso.”
Sant’ Egidio, tal y como señaló Carlos Busto, nace con el objetivo de cambiar el mundo “pero no de mano de políticas ni ideologías sino de la mano del Evangelio como hizo Francisco de Asís”, por eso el pilar de la oración es muy importante, “dedicando al final del día un espacio a la oración, a la escucha de la palabra de Dios y la oración comunitaria”.
En la Comunidad el encuentro con los pobres es un encuentro vivido como amistad y servicio, porque “no somos una agencia de voluntariado, ni somos una ong; es una comunidad que partiendo del Evangelio está al lado de los pobres, que es lo que pide el Papa Francisco”, y por este motivo el Santo Padre instituyó la Jornada Mundial de los Pobres porque la Iglesia no puede convertirse en una profesional de la caridad que tiene a los pobres como clientes, en ningún caso”.
En este sentido Carlos Busto, que fue explicando las distintas áreas de trabajo de la Comunidad, indicó que “el amor al otro por ser quién es nos mueve a buscar el bien del otro”, porque “ la caridad nace del amor y la amistad por los demás, por los más pobres”. “Nosotros somos amigos de los pobres y por eso les ayudamos organizando servicios, porque el servicio es una palabra que indica una actitud evangélica, la de servir a los demás”.
“La oración, el Evangelio y el servicio a los más pobres son los que nos han preservado de no convertirnos en una agencia de servicios sociales por un lado, ni en un movimiento ideológico y político, sino en una comunidad cristiana que escucha el Evangelio y ayuda a los más pobres, a sus hermanos y hermanas”, comentó Carlos Busto, que insistió a lo largo de su exposición en la “amistad con los pobres”, en estar cerca de ellos y conocer su vida, porque “cuando conocemos su vida les entendemos a ellos y entendemos al ser humano”.
Los pobres, según se indicó en la presentación, son parte de la Iglesia, “no son un adorno, sino que tienen que estar en el centro de la vida de nuestras comunidades, porque Jesús nos pide que ellos deben ocupar el primer puesto, no como usuarios sino como miembros de pleno derecho”.
Así Carlos Busto recordó las palabras de “un amigo de la calle” que les dijo que “estaba muy contento de estar aquí porque nosotros no somos animales que necesitan comer”, sino que precisan la Palabra y la amistad.
Además señaló que cuando el Papa Francisco visitó la Comunidad manifestó que “aquí se confunde al que ayuda con el que es ayudado y el protagonista es el abrazo. Es lo que queremos vivir en los servicios de la comunidad”.
“La amistad es gratuita y es un don que se da sin esperar nada a cambio, y cuando uno vive esta amistad con los pobres recibe mucho más de lo que da”, por eso el Papa Francisco en la citada Encíclica –en el número 79- nos dice que “el buen samaritano se fue sin esperar reconocimientos ni gratitudes”. Porque la gratuidad total nos va a ayudar a vivir el Evangelio sin poneros a nosotros en el medio, sino a hacernos prójimos de los hermanos.
La Comunidad de Sant’ Egidio no es especialista en un tipo concreto de pobreza sino que “vivimos con el espíritu abierto de ayudar al hombre medio muerto que encontramos al borde del camino y eso nos ha llevado a muchas realidades, como personas sin hogar, ancianos, las escuelas de la paz para niños de los barrios de las periferias, los migrantes y refugiados y la paz internacional”.
Enlace para ver toda la ponencia:
ENLACE PARA VER LA PONENCIA COMPLETA DE LA COMUNIDAD DE SANT’ EGIDIO EN LAS IX JORNADAS DE PASTORAL
Servicio de Comunicación de Cáritas Diocesana de Toledo