La Iglesia celebra hoy domingo 108ª Jornada Mundial del Migrante y del Refugiado con el lema, “Construir el futuro con los migrantes y los refugiados”. Una Jornada, explica el papa Francisco en su mensaje para este año, para recordar que la presencia de los migrantes y refugiados es una ocasión de crecimiento cultural y espiritual para todos.
“Gracias a ellos –destaca el Santo Padre- tenemos la oportunidad de conocer mejor el mundo y la belleza de su diversidad. Podemos la Iglesia quiere poner a cada migrante en el centro para escuchar su grito madurar en humanidad y construir juntos un <nosotros> más grande”.
En el mensaje de los Obispos con motivo de esta Jornada se indica que “las migraciones, los movimientos humanos, la vida de los refugiados son hoy lugares privilegiados desde donde Dios nos habla” y “y con él construir el futuro que Dios sueña. Lo que este futuro no tolera es ser construido “para los migrantes” sin la luz y la sal de los migrantes. No podemos olvidar a nadie si queremos vivir la catolicidad del pueblo de Dios”.
En Archidiócesis de Toledo
En la Archidiócesis de Toledo esta Jornada se ha celebrado en Toledo, en la Catedral Primada, y en Talavera, en la Basílica del Prado.
El obispo auxiliar de Toledo, don Francisco César García-Magán, ha recordado en la Catedral Primada que “el mundo del siglo XXI sigue dividido entre ricos epulones y pobres lázaros”, y ha indicado que “todos tenemos que hacer todos un ejercicio de examen de conciencia especialmente con el Evangelio sobre si nuestras actitudes son acordes con el Evangelio o se han impregnado de ideas que te llegan a ver al migrante como alguien que me quita el trabajo…Esto no es compatible con el Evangelio”.
Así ha señalado que “vosotros emigrantes traéis a esta Europa vieja y envejecida la renovación de la juventud y vuestro derecho fundamental de buscar una vida mejor”, señalando a los migrantes presentes en la Eucaristía en la Catedral Primada “que la Iglesia os acoge con abrazos y con manos de Madre”, animándoles “a no perder vuestra fe. No os contaminéis de esta Europa vacía”.
Asimismo en nombre del señor arzobispo, don Francisco Cerro Chaves, ha agradecido a Cáritas y a la Delegación Diocesana de Migraciones y Movilidad Humana el trabajo que hacen con los refugiados y migrantes, siendo un signo de credibilidad con los hermanos.
Servicio de Comunicación de Cáritas Diocesana de Toledo