El arzobispo de Toledo, don Francisco Cerro, que acompañó durante todo el encuentro a los voluntarios en Sonseca, manifestó que “el voluntariado tiene que crecer por dentro, con vida de oración, para servir por fuera”.
Con el lema “Volver a encontrarnos” se celebró este sábado en el Teatro Cervantes de Sonseca la XIV Jornada Diocesana de Voluntariado de Cáritas, que reunió a en torno a 300 voluntarios representantes de todas las Cáritas Parroquiales de la Archidiócesis de Toledo. Después de dos años sin celebrarse esta Jornada los voluntarios manifestaron su deseo de “volver a encontrarse, de compartir y de vivir la experiencia de lo que es ser voluntario de Cáritas”.
El arzobispo de Toledo, don Francisco Cerro, que acompañó a los agentes de Cáritas durante toda la mañana, recordó que “Cáritas no es una ONG, sino que es la Iglesia haciendo caridad, de ahí que sea tan importante que crezcamos por dentro para servir por fuera, descubriendo que somos llamados por el Señor a evangelizar”.
Don Francisco expresó su deseo de “trabajar junto con Cáritas Diocesana de Toledo de recuperar los niveles en el número de voluntarios que había antes de la pandemia”, pues el coronavirus ha dejado a muchas Cáritas Parroquiales sin voluntarios, “por lo que tenemos que animar a los jóvenes a participar desde la gratuidad del amor de Dios”.
En este sentido resaltó que “Cáritas tiene una caridad organizada, y así lo ha hecho muy bien”, comentando que “tenemos que vivir con alegría, con esperanza de saber que somos Iglesia y caminamos todos juntos”.
Por su parte, el director de Cáritas Diocesana de Toledo, José Luis González, agradeció a Cáritas Parroquial y a la Parroquia de Sonseca su implicación en la realización de esta Jornada, que también ha contado con la colaboración del Ayuntamiento de Sonseca al ceder el Teatro. José Luis González indicó “desde el año 2019 no nos encontrábamos y estábamos deseosos después de unos años muy duros”, señalando que “no podemos perder nunca la mirada cercana al pobre”, porque “tenemos que ser apóstoles comprometidos con los más desfavorecidos”.
Después de la inauguración y la oración realizada por los niños del Coro de San Felipe Neri de la Parroquia de Sonseca tuvo lugar la ponencia “Unidos en la Luz y en la esperanza” de Amador Casquero, coordinador de la Provincia Eclesiástica de Toledo, que de una forma muy amena, divertida y práctica realizó la ponencia “Unidos en la Luz y en la Esperanza”, manifestando que “estamos en un momento complicado por lo que tenemos que ser voluntarios de esperanza, porque la realidad es la que es pero nosotros no somos voluntarios al uso, nosotros vemos más allá”.
También ofreció los retos del voluntario del siglo XXI: un voluntario entusiasmado que viva la alegría del Evangelio; un voluntario que reconozca sus límites; que crea en los otros y en sus capacidades; que tenga los ojos y oídos abiertos y que cuente con el Padre sabiendo que actúa en nombre de la Iglesia, porque “el Padre me elige y yo le doy la respuesta”.
En la segunda parte se realizó una dinámica, titulada “Abre tu corazón” y dirigida por el delegado episcopal de Cáritas, don José María Cabrero, con el testimonio de un sacerdote acompañante de Cáritas Parroquial, de un voluntario y de una participante.
La Jornada concluyó con la celebración de la Eucaristía en el templo parroquial, presidida por don Francisco Cerro, arzobispo de Toledo.
Servicio de Comunicación de Cáritas Diocesana de Toledo