Formarse para darse mejor y darse bien. Fue el objetivo de la II Jornada de Formación de Equipos Directivos y Sacerdotes de Cáritas Diocesana de Toledo, que contó el sábado 1 de marzo con la participación de unas 40 personas, representantes de 20 Cáritas Parroquiales de la Archidiócesis de Toledo. Para dinamizar los equipos de Cáritas Parroquiales, así como la Comunidad, el ponente, Enrique Marco, coach y colaborador de Cáritas Española, realizó diferentes dinámicas con el propósito de que los responsables de Cáritas Parroquiales se dieran cuenta de cuál es su función dentro de los equipos, para ser más eficaces en la misión de trabajar por los más necesitados, pero sin descuidar a los equipos de voluntarios.
Después de la oración, dirigida por el delegado episcopal de Cáritas Diocesana de Toledo, don José Luis Martín Fernández-Marcote, el coach llevó a cabo diversas dinámicas participativas entre todos los presentes para que nunca se perdiera de vista por quién lo hacemos y porque formamos parte de un grupo, evitando en todo momento los personalismos en los equipos.
Asimismo expresó que como responsables de Cáritas Parroquiales “tenemos dos retos: que la gente quiera pertenecer a Cáritas, siguiendo el ejemplo y el testimonio alegre que da el Amor de Dios en cada uno de nosotros, y que además permanezcan y se comprometan”, generando confianza, respeto, unión y comunicación entre los voluntarios.
En esta Jornada que se celebró en la Casa de Ejercicios “El Buen Pastor” de Toledo también se trató el tema del conflicto en los equipos, manifestando Enrique Marco que “tenemos que saber cómo responsables cómo están las relaciones de cada persona del equipo con las otras, cultivando la afectividad e identificando los conflictos”, porque “todo ello nos llevará a ilusionar a los equipos y por lo tanto a entregarnos más a las personas que acompañamos en nuestras Cáritas, porque el acto más grande de generosidad del ser humano es el ofrecimiento, el llámame si me necesitas”, trabajando así “el liderazgo del servicio”.
También profundizó en las disfunciones que se producen en los equipos como son la ausencia de confianza, el miedo a los conflictos, la falta de atención y la falta de compromiso, y una vez que se conocen y se detectan se podrá trabajar en aportar soluciones que permitan el mejor funcionamiento de los equipos.
Servicio de Comunicación de Cáritas Diocesana de Toledo
